El tiempo que tarda un juzgado en lanzar o echar a un inquilino moroso depende por desgracia de los medios con los que cuente el juzgado. A nivel procedimental es claro, si bien en la práctica se puede dificultar, sobre todo en la fase de lanzamiento si el inquilino o arrendatario moroso no se marcha voluntariamente, ya que es necesario que asista la policía al desahucio.